En la primera parte, Boca logró ponerse en ventaja rápidamente con un cabezazo de Anselmino, quien aprovechó un preciso centro de Luis Advíncula desde la banda derecha.
Poco después, Edinson Cavani estuvo cerca de ampliar la ventaja con un tiro libre, pero el balón se fue desviado cerca del poste izquierdo del arquero de Gimnasia, Marcos Ledesma.
El resto del primer tiempo fue bastante equilibrado, con escasas oportunidades claras para ambos equipos, aunque Boca se mostraba cada vez más cerca de aumentar el marcador.
Al inicio del segundo tiempo, el partido se retrasó debido a disturbios entre las hinchadas de ambos clubes. Tanto la policía, que utilizó balas de goma y gases lacrimógenos, como miembros del Consejo de Fútbol de Boca, incluyendo al presidente Juan Román Riquelme, tuvieron que intervenir para restablecer el orden.
Una vez reanudado el encuentro, casi treinta minutos después de lo previsto, Gimnasia buscó con urgencia el gol del empate para seguir en la lucha por la Copa.
No obstante, Boca tuvo una gran oportunidad para marcar el segundo gol cuando Cavani estrelló un remate en el travesaño, tras un excelente centro de Exequiel Zeballos desde la izquierda.
Más adelante, Gimnasia encontró el empate de manera inesperada. Un tiro de esquina desde la derecha fue desviado por De Blasis, quien sin querer envió el balón al fondo de la red defendida por Brey.
En los minutos finales, Milton Giménez desperdició una ocasión clara para darle la victoria a Boca. Se encontraba solo en el área pequeña, pero un defensor de Gimnasia logró bloquear su disparo. Durante la tanda de penales, el joven arquero de Boca, Leandro Brey, tuvo un papel fundamental, deteniendo cuatro de los cinco disparos que le hicieron y asegurando el pase a la siguiente ronda.
Brey comenzó su brillante actuación al atajar el penal de Rodrigo Castillo, lanzado hacia su poste izquierdo, pero sin la suficiente fuerza. Luego, en el segundo penal, demostró gran agilidad al detener el tiro de Franco Troyansky, quien había disparado al centro del arco.
El tercer penal atajado fue el del capitán de Gimnasia, Leonardo Morales, nuevamente hacia su palo izquierdo, esta vez a media altura.
A pesar de un fallo de Milton Giménez en el cuarto disparo de Boca, la serie seguía en manos de Brey. En el último penal, David Zalazar intentó colocar el balón cerca del poste derecho, pero Brey adivinó la dirección y se quedó con el remate, otorgando a Boca una histórica clasificación.
De esta manera Boca le ganó 2 a 1 por pensales a Gimnasia.