El Gobierno ha puesto en marcha un plan de contingencia energética para enfrentar los desafíos de los próximos dos años, debido a la insuficiencia en la generación de energía, con el objetivo de mitigar el riesgo de cortes de suministro en hogares e industrias.
Este plan se formalizó a través de la Resolución 294/2024 de la Secretaría de Energía, publicada recientemente en el Boletín Oficial.
La norma introduce una serie de incentivos dirigidos a las empresas generadoras de energía para aumentar la producción y propone un esquema de limitación de la demanda para los grandes consumidores, en ambos casos a cambio de beneficios económicos.
Es importante señalar que la resolución no incluye medidas para los sectores residenciales.
Según los expertos, se estima que durante el próximo verano, que se prevé muy caluroso, la demanda de energía podría alcanzar picos de 30.000 megavatios, mientras que la capacidad de generación se mantendría en torno a los 29.000 megavatios.
Por lo tanto, el objetivo será reducir la demanda de los consumidores más grandes y fomentar la generación alternativa con equipos que actualmente están inactivos y requieren reacondicionamiento.
Además, se faculta a CAMMESA (Compañía Administradora del Mercado Mayorista Eléctrico) para facilitar la importación de energía desde países vecinos en los días de mayor demanda.
Se ordena también a la Subsecretaría de Energía Eléctrica implementar un plan integral de disponibilidad preventiva en colaboración con el ENRE y los concesionarios de transporte de alta tensión y distribución troncal, así como con los Proveedores Adicionales de la Función Técnica de Transporte (PAFTT), para identificar los nodos críticos que presentan sobrecarga, y asegurar la conexión con transformadores de reserva cuando sea necesario.
En un plazo de 15 días, las empresas deberán presentar un programa de Atención a Contingencias para situaciones de indisponibilidad en sus áreas de concesión, que se enviará a la Subsecretaría de Energía Eléctrica.
Este programa debe detallar:
1 – Las acciones de mantenimiento preventivo para evitar fallos mayores y garantizar que la infraestructura existente opere a su máxima capacidad.
2 – La preparación de recursos físicos, incluyendo la disponibilidad de Unidades de Generación Móvil (UGEM), propias o alquiladas, y personal para enfrentar contingencias.
3 – La creación de un centro de atención telefónica que funcione de manera continua, con personal capacitado y suficiente para atender consultas y reclamos de los usuarios.
4 – Un esquema de atención proactiva hacia los usuarios por parte de los proveedores del servicio de distribución, brindando información sobre las condiciones del servicio y, si corresponde, sobre su restauración. Además, el informe deberá incluir un régimen de sanciones ex-post por el incumplimiento de las acciones estipuladas en los contratos de concesión vigentes.
En lo que respecta a la industria y el comercio, se establecerá un mecanismo de gestión de demanda para los Grandes Usuarios Mayores (GUMAS), que será voluntario, programado y remunerado, y que premiará a aquellos que reduzcan su consumo de la red por debajo de lo acordado.
Asimismo, se crea el Comité de Seguimiento del Plan de Contingencia, el cual realizará un monitoreo constante y evaluaciones periódicas.
Este Comité mantendrá un diálogo activo con el Servicio Meteorológico Nacional (SMN), dado que las condiciones climáticas tendrán un papel crucial en el desarrollo del programa.
Por último, se añadirán generadores en diversos puntos críticos de la provincia de Buenos Aires para facilitar el flujo de energía hacia otras áreas.
