Durante su participación en la cena anual organizada por el Comité Nacional de Relaciones entre Estados Unidos y China, el embajador chino en Washington, Xie Feng, pidió a la administración estadounidense que actúe con mayor racionalidad y ponga fin a las políticas de presión extrema. Advirtió, además, que una confrontación comercial o arancelaria entre ambas naciones es un conflicto que “no tiene ganadores”.
Xie expresó que China no busca entrar en una disputa de este tipo, pero tampoco permanecerá pasiva si se ven comprometidos sus derechos o si se socavan los principios del comercio internacional y el sistema multilateral que lo rige.
El diplomático hizo un llamado a Washington para que retome el camino del diálogo constructivo, basado en el respeto mutuo y la igualdad, y evite repetir patrones de confrontación que solo agravan las tensiones y dificultan los vínculos económicos y comerciales.
En ese marco, Xie remarcó la importancia de fortalecer el entendimiento bilateral y abogó por una cooperación basada en beneficios compartidos, paz y respeto. Según la agencia estatal Xinhua, instó a ambas naciones a sumar esfuerzos para fortalecer los lazos y fomentar una mayor cooperación en diversos ámbitos.
Finalmente, subrayó la necesidad de que China y Estados Unidos trabajen juntos para superar desafíos comunes, mantengan el rumbo del desarrollo conjunto y eviten distracciones que desvíen a ambas potencias de una relación estable, firme y sostenible a largo plazo.