La importancia estratégica del Estrecho de Ormuz y el impacto global de su posible cierre

El Parlamento iraní aprobó una moción para bloquear el Estrecho de Ormuz, una vía marítima clave por donde circula cerca del 20% del petróleo mundial.

Este paso estratégico conecta el Golfo Pérsico con el Golfo de Omán y el mar Arábigo, y es fundamental para el transporte de crudo hacia mercados globales. Si la medida cuenta con la aprobación final del líder supremo Ali Khamenei, podría provocar un fuerte impacto en los mercados energéticos internacionales y en la economía global.

Expertos advierten que el cierre del Estrecho podría generar un aumento inmediato de entre el 30% y 50% en los precios del petróleo, con posibles efectos en el costo de la gasolina a nivel mundial. Asia sería la región más afectada, aunque Estados Unidos también sufriría consecuencias, ya que aproximadamente 2 millones de barriles diarios destinados al país pasan por esta ruta.

Además del impacto directo en los consumidores, se prevé una ola de especulación, compras anticipadas y acaparamiento de reservas, que podrían intensificar la competencia por el suministro y elevar aún más los precios.

El Estrecho de Ormuz, con sus canales estrechos y cercanía a la costa iraní, también representa un punto vulnerable para ataques y tensiones militares en la región. Aunque Irán ha amenazado en varias ocasiones con cerrar esta vía en respuesta a sanciones internacionales, nunca llegó a concretar el bloqueo, incluso en épocas de conflicto intenso como la guerra con Irak en los años 80.

En respuesta a esta situación, desde Washington calificaron la medida como “un suicidio económico” para Irán. Autoridades estadounidenses, incluyendo al vicepresidente JD Vance y al secretario de Estado Marco Rubio, pidieron a China —aliada estratégica de Teherán— que intervenga para evitar el bloqueo.

Mientras el Parlamento iraní dio el primer paso, la decisión definitiva dependerá del ayatolá Khamenei, en un contexto de alta tensión geopolítica y económica que podría repercutir en todo el mundo.

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