La creciente demanda del mercado por activos en dólares ante la proximidad de las elecciones, sumada a la demora en el anuncio de un eventual respaldo financiero desde Estados Unidos, está forzando al Tesoro Nacional a utilizar las divisas obtenidas gracias a la liquidación extraordinaria del sector agroexportador, que se benefició de retenciones reducidas a cero. Según estimaciones del sector financiero, el Tesoro contaría actualmente con entre 600 y 700 millones de dólares disponibles.
A comienzos de esta semana, operadores del mercado detectaron que el Tesoro permitió una suba de cinco pesos en el límite informal del dólar “blue”, llevándolo hasta los $1.430.
Hasta hace pocos días, el Gobierno venía defendiendo un tope para el dólar mayorista en torno a los $1.425. Sin embargo, el lunes ese valor fue ajustado al alza, instalando una nueva referencia dentro del rango oficial de flotación, cuyo límite superior hoy se sitúa en $1.481.
Aunque se trata de intervenciones con recursos públicos, el Ministerio de Economía no brinda información oficial sobre estas operaciones, lo que alimenta diversas especulaciones entre los analistas.
Con base en la actividad del sistema de operaciones cambiarias, se estima que durante las últimas cinco jornadas el Tesoro habría vendido entre 1.400 y 1.500 millones de dólares para evitar una mayor depreciación del peso.
El repunte del dólar contradice la postura oficial sostenida hasta hace poco, cuando desde el Palacio de Hacienda se minimizaban los riesgos de una devaluación brusca con la frase “¿con qué pesos?”, aludiendo a la supuesta falta de liquidez para una corrida cambiaria.
Con esta dinámica, ya se habría utilizado más del 65% del total de 2.200 millones de dólares obtenidos mediante la liquidación excepcional del agro.
Conviene recordar que, mientras el dólar se mantenga dentro del rango de flotación, es el Tesoro quien interviene en el mercado. Solo si se alcanza el techo de esa banda, la responsabilidad pasaría al Banco Central, que podría utilizar los fondos transferidos por el Fondo Monetario Internacional (FMI).
Aún restan 11 días hábiles hasta los comicios, y los analistas no descartan que en ese período el dólar paralelo supere nuevamente su techo, presionando al tipo de cambio oficial y obligando al BCRA a actuar.
Por ahora, la única expectativa que podría moderar esta tensión cambiaria es el anuncio de un acuerdo concreto con la administración estadounidense, aunque hasta el momento los detalles siguen siendo escasos.