Aquél equipo dirigido por Guillermo Abbas quedó grabado en la memoria de los hinchas de Talleres por varios motivos: la calidad de sus jugadores, el atractivo juego del equipo, una delantera altamente efectiva y un dominio evidente sobre cada uno de los rivales a los que se enfrentó.
El 28 de octubre de 1978, Talleres se coronó campeón del Torneo de Primera “C” al vencer a Colegiales por 5-0 en Remedios de Escalada, cuando aún quedaban cuatro fechas para el final del torneo. Además, la cancha de Timote y Castro se convirtió en un fortín que resultó impenetrable para cada uno de los equipos que intentaron enfrentarlos.
Talleres sumó 68 puntos de los 76 posibles, dejando atrás las buenas campañas de Deportivo Morón y Deportivo Español. También estableció una marca difícil de igualar al marcar 118 goles, superando la cantidad establecida por el campeón de Primera División, Independiente, en 1938, en plena época del juego ofensivo, quien alcanzó los 115 goles.
La cantidad de goles que marcó Talleres en 1978 es un récord en el fútbol argentino de tercera categoría.
El equipo jugó 38 partidos, ganó 32, empató 4 y perdió solo 2. Marcó 118 goles y solo recibió 30. Como local, ganó 18 partidos y solo empató uno (obteniendo así 37 de 38 puntos posibles), marcando 69 goles y recibiendo solo 13 en contra. Como visitante, ganó 14 partidos, empató 4 y perdió solo 2, marcando 49 goles y recibiendo 17 en contra.
