La trigésima segunda edición del torneo se llevó a cabo desde el 10 de agosto hasta el 4 de noviembre de ese mismo año. A diferencia de otras ocasiones, no se estableció una sede fija para el torneo, por lo que los partidos se jugaron en régimen de ida y vuelta.
El formato de competencia consistió en tres grupos, cada uno compuesto por tres equipos. Los primeros lugares de cada grupo avanzaron a las semifinales, etapa en la que ingresaba el campeón anterior. En este caso, Paraguay, quien había ganado la Copa en 1979, fue el equipo que ingresó a esta fase del torneo.
Uruguay fue parte del grupo 1 junto con Venezuela y Chile. La selección dirigida por Omar Borrás debutó el 1 de septiembre en el Estadio Centenario con una victoria de 2-1 sobre la selección chilena. Los autores de los goles fueron Acevedo y Morena (de penal), mientras que Orellana descontó para los visitantes. Tres días después, Uruguay goleó 3-0 a Venezuela con goles de Cabrera, Morena y Luzardo. El partido se jugó en el Estadio Centenario ante una multitud de 70.000 personas.
El tercer partido fue la única derrota de la selección uruguaya en aquella Copa América. En el Estadio Nacional de Santiago, Chile venció 2-0 a Uruguay. Una semana después, la Celeste se recuperó y le ganó a Venezuela 2-1 en el Estadio Brígido Iriarte de Caracas. Uruguay comenzó ganando con un gol de Santelli, pero tres minutos después Febles empató para el equipo local. Faltando tres minutos para el final, Carlos Aguilera convirtió y le dio la clasificación a Uruguay.
En las semifinales, Uruguay se enfrentó a Perú en régimen de ida y vuelta. El 13 de octubre, en el Estadio Nacional de Lima, la Celeste venció 1-0 con un gol de Carlos Aguilera en el segundo tiempo. En aquel encuentro, Rodolfo Rodríguez le atajó un penal a Franco Navarro.
La revancha de la semifinal entre Uruguay y Perú se disputó en Montevideo el 20 de octubre. La selección visitante comenzó ganando con un gol de Malásquez a los 24 minutos, pero en el complemento Wilmar Cabrera empató para Uruguay. El empate le dio la clasificación a la Celeste.
La primera final ante Brasil se disputó el 27 de octubre en el Estadio Centenario. Enzo Francescoli, a los 41 minutos, y Víctor Diogo, faltando diez minutos para el final, convirtieron los goles celestes. A la semana siguiente, el 4 de noviembre, se jugó la revancha en Salvador. Brasil comenzó ganando con un gol de Jorginho a los 23 minutos, pero faltando trece minutos Carlos Aguilera empató y le dio el título a Uruguay ante 95.000 personas.